Críticas de cine: «Argo», de Ben Affleck

Título original: Argo.
Dirección: Ben Affleck.
Guión: Chris Terrio, Joshuah Bearman (por el artículo "Escape from Tehran"), Antonio J. Mendez (autor del libro Master of Disguise).
Producción: Warner Bros. Pictures, GK Films, SmokeHouse Pictures.
Nacionalidad: Estados Unidos.
Duración: 120 min.
Estreno en España: 26 de octubre, 2012.
Temática: Thriller, drama, histórica.
Correlación: Independiente.

Creo que todos podemos recordar algunas películas bastante curiosas como Dogma (Matt Damon, Jason Mewes, Kevin Smith, Alannis Morrisette, etc), Daredevil (Collin Farrel, Jennifer Garner) y otras muchas, donde habrá un denominador común llamado Benjamin Geza Affleck, o como solemos conocerle más habitualmente, Ben Affleck. Pese a ser junto con Matt Damon el escritor del guión de la película El Indomable Will Hunting –por el que ganarían un Globo de Oro y un Oscar a Mejor Guión Original–, ha cobrado fama debido a películas de baja calidad como han podido ser Gligli, en la que actuó junto con su ex-mujer, Jennifer López. Es por eso por lo que Affleck siempre me había parecido un actor bastante mediocre.

Cual es mi sorpresa cuando después de un montón de años en el que lo único que supe de él fue que su ex Jennifer López se había asegurado el trasero por no se cuántos millones de dólares y que en su contrato matrimonial le pedía como cláusula acostarse con ella no se cuantas veces a la semana… ¡CHAS! Aparece en una película como director y con una temática bastante interesante. Un aparente thriller político que realmente es una narración de los acontecimientos que tuvieron lugar en Irán en 1979, cuando un grupo de exaltados iraníes asaltaron la embajada norteamericana en Teherán, matando a muchos en el asalto y las distintas revueltas que se sucedieron desde aquel día. Únicamente pudieron escapar seis personas. Estas, las protagonistas de la película, corriendo un grave riesgo para sus vidas, tuvieron que pedir asilo en la residencia del embajador canadiense. Salvadas por el momento, se encontraron en una situación en la que podrían poner en peligro las relaciones internacionales del gobierno canadiense con el gobierno iraní por haber ofrecido asilo a dichos personajes. Declarados traidores al pueblo por ser ciudadanos del país que envió a la CIA, con la colaboración del MI6 británico, a derrocar al líder que todos los iraníes habían elegido democráticamente –el tal Mossadegh–, a cambio de un títere adiestrado por las dos grandes potencias que volvía a darle la manipulación de los recursos naturales del país a las potencias extranjeras –el Sha Pahlevi–, en vez de darle su control al pueblo como hizo Mossadegh.

Retenidos pues nuestros protagonistas en Teherán sin posibilidad de huir con una revuelta social en su apogeo, el gobierno de los EE.UU empezará a esbozar distintos planes de acción para sacar a los funcionarios acorralados. En pleno desfase de ideas, a cada cual más rocambolesca, aparecerá nuestro actor y director, Ben Affleck en el papel de Tony Mendez, un hombre serio y pensativo, experto en rescates de máximo riesgo, al que se le ocurre una idea bastante divertida a la par que peligrosa: sacar a los "rehenes" convertidos en actores de una película de ciencia ficción que un supuesto loco productor americano quiere grabar en Irán. Como os podréis imaginar, se llamará Argo y podréis ver mil guiños a distintas películas de la época, en concreto a La Guerra de las Galaxias, de la que incluso tomarán la idea de pintar a un Chewbacca de azul. Para la consecución de la misión se realizarán distintas tapaderas, a cada cual más creíble, utilizando tanto para el maquillaje como para los recursos técnicos y legales a dos figuras bastante importantes en la historia de Hollywood: Alan Larkin y John Goodman, quienes ponen en ocasiones esa pequeña nota de humor que nos hace falta para distender un poco la tensión que provocan los acontecimientos en Teherán.

❒ «Argo» se basa en el libro homónimo escrito por Antonio Joseph Mendez (interpretado por Ben Affleck). Edita RBA Libros, 304 págs, octubre 2012.

Teherán, 4 de noviembre de 1979. La revolución iraní da un vuelco cuando la Embajada de los Estados Unidos es asaltada por un grupo de estudiantes alentados por el ayatolá Jomeini. Se teme por la vida de los rehenes que han quedado en su interior y, de hecho, la tensión va en aumento a medida que las negociaciones para su liberación se tornan cada vez más infructuosas. Argo es la historia de cómo un agente de la CIA, Antonio J. Mendez, ideó y ejecutó un plan tan rocambolesco como ingenioso para conseguir que dichos rehenes escapasen sanos y salvos de las manos de sus captores.

Lo curioso de esta película no es ya la calidad técnica y fotográfica de los planos, sino que han querido representar fielmente todo lo que ocurrió durante aquellos tensos días. En el tráiler bien podría parecer que Argo pueda ser una película de acción al más puro estilo Ronin, cosa que también lleva a error el mismo cartel publicitario. Sin embargo, bien puedo decir que gracias a esto habrá muchas personas que se hayan visto una película muy interesante, cargada de referencias históricas e impactante como quizás haya visto pocas a lo largo de mi vida.

Curiosa por la forma tan magistral en la que Ben Affleck sabe plasmar el miedo, la incredulidad y el suspense, indagué un poco en su biografía. Fue en aquel momento cuando descubrí eso que se denomina “diamante en bruto”. Resulta que nuestro actor venido a menos, terminó los estudios especializados en política de Oriente Medio, por lo que tenemos ante nosotros a un director que realmente sabe qué es lo que quiere mostrar y como quiere hacerlo gracias a sus años de experiencia con los astros del celuloide. Como resultado nos queda una cinta realmente impresionante, educativa e impactante, que nos recuerda acontecimientos que hoy en día parecen haberse olvidado. Un guión capaz de dejarte pegado a la butaca del cine sin parpadear siquiera para no perderte ningún fotograma de una película en la que, sin llegar a pegarles ni un solo tiro a nuestros protagonistas, tiene la mayor mezcla de acción y violencia jamás vista por mí hasta este momento. Para mi gusto, acaba de nacer un nuevo tipo de película de acción en el que se combina la historia política de un país tan tempestuoso como Irán y la capacidad de supervivencia de esos funcionarios políticos bien asesorados por la figura de Ben Affleck –en el papel de Tony Méndez–, un experto en rescates de la CIA.

P.D.: Cuando la veáis me gustaría saber si a todos os pareció igual de sorprendente que a mí las propuestas que daban los supuestos “entendidos” en el comité de crisis de Estados Unidos, para poder salvar a esas seis personas… Para mi gusto, es la nota cómica de la película.

P.D. 2: Se me olvidó comentaros en la reseña que, tras la reciente celebración de los Globos de Oro, Argo ha conseguido dos premios. Uno en la categoría de mejor película de drama –pese a que las encuestas indicaran que sería Lincoln la agraciada– y otro en la categoría de mejor director. Creo que Argo realmente ha sorprendido en muchos aspectos, tanto a crítica como a público por la gran capacidad de gestión y dirección de Ben Affleck. Si aún no la habéis visto, no perdáis la oportunidad de hacerlo en cuanto podáis.

por Cyram enero 17, 2013