Cuando tomas entre tus manos la novela 300 Guerreros de Andrea Frediani y ves su año de publicación original, allá por 2007, lo primero que piensas es en Gerard Butler, caracterizado como el rey Leónidas y gritando a voz en cuello aquello de "¡Esto es Esparta!". O lo que es lo mismo, otra novela de espartanos que nace a la sombra del éxito cinematográfico de 300, de Zack Snyder. Pudiera ser. Lo que es indiscutible es que nos encontramos con una realista, detallista y muy bien documentada recreación de una de las contiendas desesperadas más fascinantes del mundo clásico, la
Batalla de las Termópilas, que enfrentó al
rey Leónidas y sus aliados contra
Jerjes y el fabuloso
Imperio persa, afanado en expandir sus fronteras y anexionarse toda Grecia.
¿Qué nos vamos a encontrar en esta novela? Desde luego, no un épico cantar de gesta. Todo lo contrario. Nos introducimos en la historia a través de la visión de Aristodemo, el único superviviente espartano de la contienda, un valeroso combatiente que al retirarse de la batalla por sus heridas, es despreciado por las estoicas gentes de Esparta por lo que consideran cobardía. Además, Aristodemo no es un espartiata al uso. Una serie de motivos personales le hacer rechazar con violencia a su rey, sus costumbres, su pueblo. Ni cree en Leónidas, ni en la propia cultura espartana, ni en su política, ni en toda la Hélade. Es carne de cañon y se rebela contra el designio de ser utilizado para que otros alcancen su gloria personal en una batalla que desde el principio se augura como el suicidio colectivo de un puñado de soldados anónimos, prescindibles para el gobierno de Esparta.
No vamos a encontrar una narración amable, sino cruda, violenta e hiperrealista. Sexo, sangre, vísceras, nada de medias tintas. La violencia engendra violencia, y más aún en el seno de los ejércitos que se dirigen a una muerte segura y que saben que no hay nada más allá del frente de batalla. Nos encontraremos que, los soldados que creen ingenuamente en los más altos ideales, son los primeros en caer y sufrir la violencia animal de los que han perdido su humanidad en aras de la supervivencia.
“Una visión muy diferente de la Batalla de las Termópilas”
Frediani es un experto en la materia y en ocasiones su entusiasmo por recrear al milímetro cada escena, cada gesto, cada armadura, cada formación o falange es tal, que llega a apabullar por exceso descriptivo. Su entusiasmo es realmente encomiable, pero sinceramente, ¿es necesario utilizar tres páginas completas para explicar, punto a punto, cómo se pone una armadura espartana, por ejemplo? Tal ingente cantidad de información, con tal cantidad de vocablo clásico, frena muchísimo el ritmo narrativo y en ocasiones, he tenido que retroceder varias páginas para retomar el hilo de la acción, perdida ya entre tanta marea informativa. De lo único que peca el libro es de su exceso de didactismo descriptivo, al punto de encontrarnos con clases magistrales de historia clásica que ahogan la acción de la novela.
En cuanto a la edición de 300 guerreros, esta es simplemente maravillosa. Es uno de esas trabajadas y cuidadas ediciones que por sí solas son capaces de vestir la biblioteca de casa. Una cuidadísima encuadernación, papel de calidad, pequeñas ilustraciones que acompañan el inicio de cada capítulo y que demuestran el mimo y el cuidado invertido por Bóveda en la publicación de la novela. Hacía mucho que no tenía un libro tan bien acabado entre las manos.
300 guerreros es un buen libro histórico, muy documentado, con una visión muy diferente de la Batalla de las Termópilas de la que estamos acostumbrados, y que no dejará indiferente a los apasionados de la novela histórica con grandes dosis bélicas.
Información adicional
Histórica Literatura Novela Grecia clásica
300 guerreros.
(300 Guerrieri. La Battaglia delle Termopili).
Traducción de M.P.V.
Bóveda, marzo de 2011.
528 páginas.
Disponible en ebook.
17 € (rústica con solapas), 9,99 € (electrónico).
Lectura independiente
Primeras páginas
por Eilonwy
abril 01, 2012
4 comentarios
El gran problema es que libros como éste se publiquen a la vez que se estrenan películas similares en este caso 300.
Puede que sea bueno, o muy bueno, pero te provoca un poco de rechazo el hecho de que aprovechen la popularidad de la película para ahorrar gastos de publicidad, que en esto los del Canal de Historia son veteranos
A mí no me provoca rechazo, es más, las películas suelen despertar ganas de saber más y ahí es donde engancha la literatura :o).
Parece interesante, sin duda, a pesar de las vísceras, y no me importaría saber cómo se pone una armadura espartana XD. Aún así, es una pena que frene la acción. Cosas que un editor tendría que decirle a un escritor, no?
Gracias por la reseña y besotes guerreros.
@Capitán Boone, supongo que se potencia lo que en esos momentos el público demanda. ¡El mercado manda!
@Babel, a mí la película no me gustó nada y muchas veces, una película puede hacer justo lo contrario. El libro es un poco crudo, pero la visión que da, tan distinta a lo que el cine muestra, hace que merezca la pena leerlo.
A mi la verdad es que no me parece mal que se aproveche el éxito mediático de ciertas obras (tebeo o películas, esto último tiene mil millones de veces más fuerza) para que saquen novelas o lo que sea. Si la obra en cuestión no tiene la suficiente fuerza como el original mal vamos, pero si es buena, bienvenida sea.
A veces es el único camino para dar a conocer ciertas temáticas o que la gente se enganche a ciertas cosas, como sucede con algunas obras de fantasía épica actual, o novelas juveniles, que al final al que le gusta de verdad se queda para siempre, pero al que no lo dejará de lado como con todo.
Por lo menos este "300 Guerreros" se ha sacado en España mucho tiempo después del "300" de Snyder y Miller, una película que a mi, por cierto, sí me gustó bastante, como el cómic.
Rebienvenido sea por estos lares, Capitán Boone. ;)
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.