"Piratas del Caribe: En Mareas Misteriosas", de Rob Marshall (por Loren)

Reseña de la cuarta entrega de 'Piratas del Caribe', dirigida por Rob Marshall, y donde Jack Sparrow sigue siendo el protagonista junto al temible Edward Teach (Barbanegra) y el ahora corsario, Barbossa. Todos ellos buscarán la Fuente de la Eterna Juventud para sus propios fines.

La cuarta entrega de los Piratas del Caribe de Disney viene marcada con una cierta temática oscura y mucha fantasía que la propician como una película enclavada en el género de la fantasía, tanto como puede serlo en las películas de piratas. Su principal reclamo para esta entrega, una vez dejados de lado al dúo Orlando Bloom / Keira Knightley, es volver a ver de nuevo al bueno de Johnny Depp como Jack Sparrow, con sus ademanes y salidas de tono, al nuevo villano de turno, Ian McShane (Deadwood) caracterizado como el temible Barbanegra, y a la española Penélope Cruz, que trabaja en esta nueva entrega de la franquicia como Angelica Malon, hija del pirata de las mechas ardientes, Edward Teach, alias "Barbanegra". El argumento de la cinta es a la vez simple y muy efectivo: la Fuente de la Eterna Juventud, un misterioso reducto de poder, es capaz de otorgar la vida eterna a aquel que complete un ritual preestablecido. Barbanegra, reconocido practicante de magia vudú, y atemorizado por una profecía que dicta que morirá a manos del hombre de la pierna de madera, comienza a obsesionarse por buscar dicha fuente mágica, momento en el cual entrará en escena el pirata Jack Sparrow, quien también parece estar interesado en la fuente, a tenor de lo visto en los films previos.

Uno de los defectos principales de Piratas del Caribe: En el Fin del Mundo fue la enorme inclusión de elementos de corte sobrenatural, cuya explicación e integración en la historia fue bastante pobre si lo comparamos con las dos cintas precedentes (los muertos vivientes, la leyenda de Holandés Errante...). Afortunadamente, en Piratas del Caribe: En Mareas Misteriosas se ha conseguido llegar a cierto equilibrio, repitiendo los esquemas que funcionaban en las tres primeras películas, eliminando otros que creaban cierto lastre, tanto interpretativo como argumental. Es justo lo contrario que me pasó en su momento con Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal o La Jungla 4.0, que me parecieron decepcionantes comparadas con su caché previo. En Mareas Misteriosas tiene cierto toque que antes no se daba en anteriores películas, como las alusiones religiosas mediante al personaje del misionero, cautivo en el barco de Barbanegra.

El prólogo está ambientado en el sucio y húmedo Londres del siglo XVII. Un cambio de registro interesante, donde dejaremos las aventuras marítimas por un rato y veremos algún cameo inesperado.

Si antes la historia se centraba casi exclusivamente en un Jack Sparrow haciendo monerías (que las hay aún), podemos decir sin temor a equivocarnos que en esta nueva entrega su papel se ve en cierta medida encumbrado por otros personajes que tienen un mayor poder visual en escena. Hablamos, cómo no, del imponente Barbanegra, cuya interpretación a manos de Ian McShane es más que satisfactoria, y seguro que en versión original es incluso aún mejor por el registro vocal que tiene el actor. Su misticismo, el aura de poder que desprende en cuanto conocemos que es practicante de la magia vudú (incluso su primera aparición), los momentos en que utiliza su espada para manejar su barco, el Venganza de la Reina Ana, que a su vez ha sido arrebatado a ese otro interesante personaje de la saga como es el Capitán Héctor Barbossa, ahora metido a corsario al servicio de la corona de Inglaterra (una de las vías que solían tomar los piratas).

Barbossa ha estado presente en "Piratas del Caribe" (lo mismo que el segundo de abordo de Jack, Gibbs, también disponible en esta cuarta entrega) desde que apareció por vez primera en La Maldición de la Perla Negra, donde fue un muerto viviente sólo visto a la luz de la luna. Desde entonces ha ganado protagonismo y presencia en pantalla, siendo uno de los personajes más queridos y mejor trabajados de la saga, especialmente en la tercera película de la misma. Magistralmente interpretado por Geoffrey Rush, el Capitán Barbossa es uno de esos personajes pirata que se recuerdan, dotado ahora con una pata de palo cortesía de Edward Teach. Si Barbossa ya era un pirata hecho y derecho, ahora lo es aún más con su pierna de madera, recordando al célebre John Silver el Largo de La Isla del Tesoro. Hay quien diría que uno no es un verdadero pirata hasta que tiene algo artificial en su cuerpo, ahí están otros como el Capitán Garfio para atestiguarlo. Barbossa es una de las figuras estrella de En Mareas Misteriosas, corsario o no, aún tiene mucho que ofrecer como personaje.

El temible pirata Barbanegra (Ian Mcshane), conocedor de los misterios vudú. Se sabe algún que otro truco para hacer hablar a Jack Sparrow.

Dos españoles trabajan en la cinta con papeles destacados. Uno de ellos es Óscar Jaenada, que ha protagonizado recientemente la serie Piratas en Teleinco (con mayor o menor fortuna). Cambiando totalmente de tercio, pues su interpretación aquí no tiene absolutamente nada que ver, el español repite como personaje nacional, pero en un papel secundario que encabeza las fuerzas españolas que buscan la Fuente de la Eterna Juventud. Un papel adecuado, de corta aparición en pantalla, y que sin embargo a mi por lo menos me ha satisfecho sobremanera. El otro papel, cómo no, es el de Penélope Cruz, que todo hay que decirlo, le viene como anillo al dedo su caracterización como la hija del temible Barbanegra. Se ha hablado mucho sobre si su inclusión en la saga sería acertada o no, pero a mi personalmente lo considero muy adecuado, en su justa medida. Sus escarceos con Jack Sparrow, así como el pasado que ambos han compartido (como siempre, Sparrow rompedor de corazones inocentes), es uno de los puntos de la cinta. Por una vez podemos disfrutar de un personaje femenino en la saga sin que resulte chillón o estridente, como ocurría con Elizabeth Swann. Por lo menos esta Angelica tiene mucha más fuerza y rudeza, una curtida pirata que crea mucha química con Sparrow. Atentos al final, que tiene sorpresa.

Tiene pinta de ser por aquí...

Sólo nos queda hablar de la supuesta adaptación de la novela cuasi homónima de Tim Powers, En Costas Extrañas (podéis leer una reseña en el enlace). Es cierto que la premisa inicial, la búsqueda de la Fuente de la Eterna Juventud, está ahí, pero el resto es mera coincidencia, tan sólo algún detalle suelto. No es no mucho menos una adaptación literaria destrozada en pantalla, pero los que esperen ver la novela de Tim Powers convertida en película saldrán profundamente decepcionados. Se trata de una adaptación libre de la trama más general de la misma, sin los alicientes que convierten a la novela de Powers en una novela de fantasía de piratas de obligada lectura para los que gusten de estas mezclas de géneros.

Podríamos hablar incluso de su BSO, que corre a cargo de Hans Zimmer, y de la que ya hablamos en su momento con la reseña del disco, On Stranger Tides. Decir que su edición musical no se corresponde en absoluto con lo que podemos oir en pantalla. Un claro ejemplo de un score con una pobrísima edición a la venta, con tan sólo un par de temas que sí plasman lo presenciado en pantalla. El resto de temas sólo se quedan para el visionado de la película, que por lo demás tiene una banda sonora sumamente interesante, a la altura de En el Fin del Mundo, y superior a las de La Maldición de la Perla Negra y El Cofre del Hombre Muerto juntas.

Ya para finalizar queda recomendar esta nueva película de la saga a los que hasta ahora han disfrutado con ella. Si eres nuevo en "Piratas del Caribe" no importa, esta película también es para ti, pues no es obligatorio haber visto las anteriores para disfrutar de esta. Repite los esquemas de las anteriores, pero explora algún que otro frente nuevo. Nuevas caracterizaciones de personajes, con un Jack Sparrow en un cierto segundo plano (aunque sigue siendo el protagonista de la historia, incluso se convierte en mero grumete) a tenor del resto de poderosos personajes que entran en escena como Barbossa o Edward Teach. Los elementos mágicos de fantasía están muy presentes, aunque no se hubiera echado de menos una mayor profundización de los mismos (como los zombis, por ejemplo), pues puede dar la sensación de estar bastante desaprovechados. Eso sí, aquí no hay materia metafísica ni puntos sin explicar, o dejados al aire para que el espectador interprete lo que quiera (como ocurría en la tercera entrega), sino que debemos concienciarnos de que la magia vudú existe de verdad en este mundo paralalelo de piratas que usan esa magia (u otra) para sus fines, los krakens existen en realidad, y las sirenas devoran a los marineros incautos. Es una película de fantasía y aventuras en estado puro, con sus defectos y sus aciertos, pero que a la larga podremos apreciar como lo que verdaderamente es, un entretenimiento mayúsculo superior a algunas películas de fantasía estrenadas en los últimos años, cuajado de espectaculares efectos especiales, y mucha, mucha aventura.

***

Ventajas:
-El prólogo ambientado en Londres, le da un cambio de registro diferente a la saga.
-Los nuevos personajes como Barbanegra o Angelica.
-La transformación de Barbossa en corsario al servicio de la corona de Inglaterra.
-Sus elementos de pura fantasía, como se ha venido viendo en anteriores entregas de la serie.
-Su puesta visual en escena.
-El clímax final.

Desventajas:
-Un mayor desarrollo o explicación de ciertos temas mágicos le hubiera venido mejor.
-El vudú... totalmente desaprovechado.
-Que de la novela de Tim Powers se tome tan sólo el nombre y la trama general.
-El doblaje del personaje de la sirena desentona demasiado respecto al del resto de personajes.

por Loren Sparrow mayo 31, 2011