Leonor de Aquitania, un personaje con mucha fuerza, pero problemático donde los haya.
Edición: Yermo Ediciones. 168 págs. 36 €.
Traducción: -.
Estas tres simples y obvias razones hacen que Leonor: La leyenda negra sea una excelente opción si lo que buscamos es un tebeo histórico bien hecho, documentado y con un apartado artístico de peso. La principal razón para leer Leonor: La leyenda negra son los personajes protagonistas de este relato que se centra en la reina Leonor de Aquitania, mujer que causó bastante revuelo en la época en que vivió –hablamos del siglo XII–, ya que no solo estuvo casada dos veces –la primera con Luis VII, la segunda con Enrique II–, siendo primero reina consorte de Francia y luego de Inglaterra, y tuvo diez hijos –entre ellos Ricardo Corazón de León–, sino que se enemistó con el Papa al permitir la boda entre su hermana pequeña y el duque Raúl de Vermandois –este último ya estaba casado–, se dice que tenía encuentros privados e íntimos con su tío en Antioquía y se unió a la segunda cruzada con su marido Luis VII, en la cual marcharon reyes por primera vez.
En cualquier caso, Leonor: La leyenda negra ofrece una perspectiva coherente con los movimientos políticos, nupciales y diplomáticos que tuvieron lugar en los sucesos reales, y los resultados de las artimañas del personaje son los mismos que podemos leer en cualquier libro de historia –este cómic no abarca el matrimonio de Leonor con Enrique II, por si alguien se lo pregunta–, pero aderezados con escenas muy bien interpretadas y que se deslizan como un guante, en especial la degradación que sufre el matrimonio de la pareja protagonista y los problemas que acarrea a ambos y al mundo que les rodea –sobre todo por las guerras provocadas por Leonor–. El hecho de que haya una buena cantidad de diálogos le hace ganar muchos enteros a Leonor: La leyenda negra, ya que un cómic de estas características sin una buena dosis de lectura no nos permitiría situarnos correctamente en el periodo histórico ni sintonizar como se debe con las sensaciones que pretende transmitir.
De Leonor: La leyenda negra tan solo me queda comentar el arte de Carlos Gómez, y es que es un auténtico gusto poder leer historia con unos pinceles como los del argentino: solidez en los escenarios, en los personajes –sobre todo en esto último– y en los entornos, y es que en conjunción con el guión de los escritores tenemos un apartado artístico muy elaborado que hace hincapié en los mencionados personajes. Sí, Leonor: La leyenda negra es una gran historia de personajes: de como sus caracteres chocan, se van desarrollando conforme el guión se abre paso hasta su final y se ven involucrados en el consabido juego de tronos de la política medieval. Pero lo mejor de todo es que estos no permanecen inalterados como puede llegar a ocurrir en otros tebeos de corte histórico: avanzan al ritmo del guión y descubrimos más sobre ellos mientras prosigue la lectura.
En definitiva, Yermo Ediciones ha tenido una excelente idea a la hora de traer a España la colección "Las reinas de sangre" –cada título es independiente aunque forme parte de una misma línea–, centrada en mujeres importantes de la historia que tuvieron un papel fundamental en ella. Con este tebeo, que recoge los tres álbumes originales en un único volumen, la editorial se marca un tanto en su trayectoria a la hora de publicar tebeo histórico de buena calidad, y si se me permite la apreciación, Leonor: La leyenda negra tiene tanto nivel que para mi gusto es de los mejores tebeos históricos que hasta ahora ha publicado la editorial. Entusiastas de Leonor de Aquitania, haceros con él o perecer.
2 comentarios
¿Carlos Gómez es español o argentino? En cualquier caso me parece un dibujante impresionante. Gran descubrimiento...
¡Ups! Es de estas cosas que corriges una y otra vez y siempre se te escapan. En un primer momento pensé que era español, pero luego vi que efectivamente era argentino (y se quedó como lo primero), así que disculpa por la confusión. :)
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.