Habrá dos versiones, por un lado una edición numerada impresa en papel especial (marca "Finch Paper"), firmada por el autor, y con ilustraciones interiores a todo color obra del artista J. K. Drummond, mientras que la portada corresponde a Michael Komarck. La edición numerada tiene una tirada de 500 copias, y digo tiene porque a estas alturas me temo que están prácticamente agotadas, por no decir totalmente.
Por otro lado, la lettered edition (numerada, pero con letra) es más exclusiva todavía, pues aparte de tener una tirada de tan sólo 52 copias, todas ellas firmadas por el autor y con una encuadernación notablemente superior, incluirá una sobrecubierta diferente a la numbered edition, una bandeja protectora personalizada (con tapa) y un desplegable extraíble que contiene una ilustración. En ambos casos, el libro tiene un total de 720 páginas.
Aquí va un poco del artwork de J. K. Drummond que podemos encontrar en el interior de ambas ediciones:
Dejando de lado a Erikson y sus narraciones malazanas, nos movemos hasta las novelas en lengua inglesa de Joe Abercrombie para mostrar la portada original americana de Red Country, al estilo de las anteriores publicaciones en E.E.U.U. Best Served Cold y The Heroes, que también fueron diseñadas por Lauren Panepinto.
Shy South comes home to her farm to find a blackened shell, her brother and sister stolen, and knows she’ll have to go back to her bad old ways if she’s ever to see them again. She sets off in pursuit with only her cowardly old stepfather Lamb for company. But it turns out he’s hiding a bloody past of his own. None bloodier.
Their journey will take them across the lawless plains, to a frontier town gripped by gold fever, through feuds, duels, and massacres, high into unmapped mountains to a reckoning with ancient enemies, and force them into alliance with Nicomo Cosca, infamous soldier of fortune, a man no one should ever have to trust.
comentarios
Impresionante todo. Y qué exclusivo ;o)
Gracias por las noticias.
Besotes ilustrados.
Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.