Dos de los pesos pesados en literatura de ciencia-ficción y fantasía en nuestro país, hablo Juan Miguel Aguilera (La Red de Indra) y Javier Negrete (La Espada de Fuego), se han unido para ofrecernos un tecnothriller que indaga en los miedos más profundos e irracionales del ser humano, a su vez en un mundo cada más carente de toda calidez y solaz que pueden brindar las personas. La Zona, que así se titula la novela, explora las posibilidades que causa un virus letal entre las comunidades de inmigrantes ilegales en Matavientos, al sur de España.
No soy muy habitual de los tecnothrillers, aunque debo admitir que generalmente me suelen atraer bastante sus temáticas. Con la propuesta literaria de estos dos grandes autores creo que voy a retomarle el gusto a este género literario, su temática es cuanto menos distinta a lo que nos tienen acostumbrados (Negrete sobre todo). Me llama lo suficientemente la atención como para echarle un vistazo y comprobar de primera mano lo que nos deparan entre las páginas de este nuevo lanzamiento de principios de año. Seguro que es una novela bastante movida. La edición corre a cargo de Espasa, se publica en rústica con solapas, con unas 456 páginas por un precio de 20 piezas de a ocho. Sinopsis:
Laura Fuster, experta en armas biológicas, debe viajar a Matavientos, en el sur de España, al corazón de un mar de invernaderos donde se hacinan miles de inmigrantes ilegales, para hacer frente a una epidemia que podría deberse a un ataque terrorista.
Al entrar en la Zona en cuarentena, descubre que la amenaza es mucho peor de lo que suponía. El virus es letal, actúa con una velocidad sin precedentes y vuelve a los enfermos extremadamente agresivos.
La investigación de Laura se convierte en una lucha por la supervivencia contra los infectados y también contra el poder de una gran corporación empeñada en que el oscuro secreto de la Zona no salga a la luz.
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Hace mucho tiempo que no oyes el suave sonido de la pluma rasgando el pergamino, así que busca en la estantería más cercana y recita los versos apropiados, pero sé cuidadoso o terminarás en la sección prohibida. ¡Por Crom! Los dioses del acero te lo agradecerán.