» Guy Gavriel Kay resume de manera
impactante toda la dinastía Tang
Hace unas cuantas semanas, terminé de leer Los caballos celestiales, uno de los primeros títulos publicados por la colección Literatura Fantástica RBA en septiembre del año pasado. La razón de que no haya hecho la reseña hasta hoy se debe a que quizás me cueste más trabajo hablar sobre un libro que no me ha entusiasmado mucho que no sobre otro que sí lo haya hecho. No obstante, dejadme explicaros esto, pues no quiero adelantaros acontecimientos.
"El protagonista de nuestra historia es Shen Tai, hijo del general Shen Gao, un verdadero héroe de guerra"
Todos sabréis que la trilogía de fantasía épica "El tapiz de Fionavar" lanzó al estrellato la carrera de
Guy Gavriel Kay como escritor. Posteriormente escribió otra novela, ésta autoconclusiva, titulada
Tigana, sobre la cual hay muchas personas que la consideran entre las mejores obras de fantasía jamás escritas. En este espacio hemos reseñado la obra, por lo que quien tenga curiosidad le animo a que entre
en este enlace y la lea. Lo sorprendente de su evolución como autor es que
no prosiguió en la línea de la fantasía pura y dura, sino que se decidió por evolucionar dentro de un subgénero de la fantasía como tal llamado fantasía histórica. Tras haber acudido a algunos certámenes de novela histórica y tras haber leído bastantes cosas de fantasía propiamente dichas, me he planteado cuáles podrían ser las diferencias entre los libros de Guy Gavriel Kay o los de otros autores que toman también la historia como un referente para llevar a cabo sus tramas. Para los que os guste la novela histórica, tendréis que asumir que el autor toma como referencia un determinado periodo histórico y a ciertos personajes, pero a los que luego cambiará el nombre y tratará de adaptar de la mejor forma posible a los acontecimientos para poderos explicar, como ha sido en este caso, el final de la Novena Dinastía, la
Dinastía Tang y cómo dio lugar a un nuevo periodo histórico llamado
Las Cinco Dinastías y los
Diez Reinos.
Evidentemente, Kay se plantearía en su momento qué podría ser mejor, hacer una novela histórica seria, con los nombres de los protagonistas tal y como fueron en realidad, dedicándose a realizar una ardua labor de investigación para hacer coincidir las ciudades y algunas villas con sus localizaciones actuales, para quizás llenar todo el libro de notas a pie de página y una bibliografía interminable al final, o directamente utilizar los datos históricos como un pretexto para narrar una buena aventura. Según he podido comprobar, decidió escoger la segunda opción, para mi gusto la que mejor podría haber escogido, ya que enfrentarse a una carga de documentación tan intensa como la que pudo tener la Dinastía Tang –a la cual se le ha otorgado el privilegio de abanderar una época dorada para el comercio, la literatura y el arte–, podría haber sido realmente inabarcable. Si aún no tenéis una idea aproximada de qué es lo que supuso este periodo para el mundo en general, fijaros en que hasta el cine se ha hecho eco de esta época con películas como La casa de las dagas voladoras o La maldición de la flor dorada.

Antes de empezar a comentaros más cosas sobre el argumento de Los caballos celestiales, permitidme que os revele un dato que puede tener mucha relevancia a medida que vayáis leyendo el libro. El título original es Under Heaven, lo que viene a ser "Bajo el Cielo". Es cierto que en español el nombre habría quedado un poco raro, pero creo que aún así habría sido mejor que el que se ha elegido, ya que a lo largo de toda la historia no veremos que los llamados "caballos celestiales" tengan una especial relevancia, por lo que este nombre nos puede llevar a error. No obstante, el título en inglés sí que nos hace mención a algo que saldrá de forma recurrente en el libro, que nos resumirá de forma realmente impactante toda la Dinastía Tang y que además hará hincapié en la nobleza y la aristocracia en general. "Bajo el cielo" es como se denomina a la familia imperial y a todos los que orbitan en su entorno. Es por lo tanto una descripción mucho más precisa de los acontecimientos que iremos descubriendo a medida que avancemos en la lectura.
"Animales que alcanzarían el rango de místicos dentro de la mitología china por su resistencia y sus aptitudes, han sido retratados incluso en grandes excavaciones de la época Tang"
El protagonista de nuestra historia es Shen Tai, hijo del general Shen Gao, un verdadero héroe de guerra. A la muerte de éste, cada uno de los hijos del general correrá una suerte distinta, formando así los hilos conductores de tres tramas diferenciadas que poder seguir a lo largo de la narración. Hundido por la pena y agobiado por las obligaciones tan estrictas de la gran ciudad, Tai decide pasar su duelo en el valle de Kuala Nor, un lugar en el que los muertos yacen insepultos con sus huesos brillando bajo el sol. Pese a que todos los que le conocieran pudieran pensar que cada vez que enterraba a uno de esos huesos sin nombre enterraba a su padre, no sabían que por las noches los muertos que aún no habían sido atendidos por el hijo del general gemían su pena a los cuatro vientos clamando por descansar finalmente bajo tierra. Como recompensa, la Emperatriz decidirá hacerle un verdadero regalo: doscientos cincuenta caballos de la lejana Sardia, a cobrar por él en persona por su labor a la hora de darle sepultura a tantas almas en pena, ya fueran del enemigo o de su propia patria.

Inicialmente todo parece ir bien, hasta que todos los poderes activos en el imperio Kitan –que es como se llama al imperio poseído por la Novena Dinastía– desean hacerse con los caballos para distintas maniobras políticas. Estos, verdaderos animales que alcanzarían el rango de místicos dentro de la mitología china por su resistencia y sus aptitudes, han sido retratados incluso en grandes excavaciones de la época Tang, por lo que os podréis hacer una idea del lío en el que meten a nuestro personaje. Un estudiante para los exámenes de mandarín realmente pésimo, un soldado que únicamente dirigió una vez a un pelotón en una ocasión y de cuya experiencia no resultó nada contento consigo mismo y un estudiante de la Montaña del Tambor de Piedra al que expulsaron porque tenía problemas para seguir las normas.Como podréis comprobar, nuestro protagonista no es un "héroe" típico, como el que podríamos encontrar en otras novelas de un corte un tanto más clásico, por lo que quizás personalmente esperaba que el libro fuese algo más parecido a El reino prohibido, no una descripción tan fidedigna del final del periodo de los Tang.

Para mi gusto quizás le falte algo a Los caballos celestiales, ya que considero que tiene un final un tanto precipitado. Es posible que Guy Gavriel Kay estuviese presionado por la entrega de la obra o quizás lo que le ocurrió es que no supo cómo encajar los destinos de nuestros tres protagonistas en el comienzo de Las Cinco Dinastías y Los Diez Reinos, como en el caso de nuestro querido An Li "Roshan", al que considero que le da un corte bastante brusco en cuanto a su trama se refiere. No creo que se deba de dar a entender al lector que un personaje es de "x" manera y que de repente, le cambies completamente su rol de la forma más absurda, en mi opinión. El caso es que a mi particularmente me pareció entretenida, pero quizás me habría esperado que el tema fantástico, encarnado por el personaje de Meshag, la manada de lobos que le sigue, la magia de los chamanes, las mujeres zorro, los cisnes espías y los mismos muertos de Kuala Nor, no abarcase quizás doscientas páginas en total de las seiscientas y pico que tiene el libro. Al igual que las intrigas palaciegas, en las cuales creo que el autor se ha confiado mucho en su recreacionismo, ya que considero que una dinastía tan poderosa y a la vez tan corrupta como la Tang, no habría urdido traiciones tan evidentes como las que aparecen en la historia. Quizás les falte un poco de picardía a algunos personajes y otros es posible que si desapareciesen el lector no llegaría a notar su ausencia por la falta de atención que tiene el autor con ellos. Los grandes damnificados en mi opinión son los personajes llamados Bytsan Sri Nespo –al cual considero que se le podría haber dado un mayor protagonismo, ya que su fuerza argumental inicial era bastante considerable. Una pena que no aparezca más que en tres o cuatro páginas en el total de la historia– y Sima Zian, un poeta llamado "El Desterrado Inmortal", ya que el autor lo describe de una forma bastante cercana al papel que desarrolla Jackie Chan en la película que ya os he citado antes, El reino prohibido.
No quiero con esto dar a entender que el libro no me ha gustado, quizás me dejé influenciar demasiado por el título de Los caballos celestiales, ya que como bien os he dicho, en las excavaciones arqueológicas se les daba un valor casi mágico. Esta información, junto con las primeras escenas acontecidas en el entorno del valle de Kuala Nor, quizás me llevó a la errónea conclusión de que la historia sería más fantástica que no histórica, por lo que no descarto que ahora que sabéis esta información y que conocéis el auténtico título del libro, los amantes de la novela histórica podáis llegar a pasar un muy buen rato con la novela.
Título original: Under Heaven.
Edición: 616 págs. Literatura Fantástica RBA, septiembre 2012.
Disponible en ebook: No.
Precio: 21 € (rústica con solapas).
Traductor: Francisco García Lorenzana.
Temática: Fantasía, histórica, dinastía Tang.
Correlación: Independiente.
El emperador Taizu de la Novena Dinastía gobierna sobre Kitai, el reino más rico y poderoso del mundo. Su poder se extiende gracias al empuje de sus ejércitos y a la burocracia de los mandarines, que han traído décadas de paz. En Kuala Nor, un campo de batalla en medio de las montañas, Shen Tai, hijo del difunto general Shen Gao, honra la memoria de su padre enterrando a los muertos, amigos y enemigos, de incontables batallas libradas en esa llanura. Los fantasmas le hablan por las noches, apenados o furiosos, hasta que entierra sus huesos y acalla sus voces. Por su labor recibe el fabuloso regalo de 250 Caballos Celestiales. Este regalo cambiará su vida y le lanzará al torbellino de las intrigas políticas y militares de finales del reinado del anciano emperador.