Valdemar reedita «Los misterios de Udolfo», el clásico de la literatura gótica de Ann Radcliffe

La editorial Valdemar regresa de las vacaciones reeditando Los misterios de Udolfo, la cuarta y más famosa novela de Ann Radcliffe (1764-1823), todo un clásico de la literatura gótica, que llevaba largo tiempo agotado en la colección Gótica, publicado de nuevo por las numerosas peticiones que se han vertido en la red demandando su nueva publicación.

Siendo como es, uno de los pilares fundamentales de la literatura gótica de hace dos siglos, no podía abandonar la tan emblemática colección de tapas negras, donde se publican títulos de enorme atractivo para el lector cultivado. Con Los misterios de Udolfo, el sumergirse directamente desde las vacaciones a los salones de la literatura gótica de calidad durante el mes de septiembre se convierte en un punto de referencia para los aficionados.

La edición, en tapa dura sin sobrecubierta, tiene más de setecientas páginas y sale a un precio de 36,50 doblones.

Sinopsis:

Ann Radcliffe (1764-1823) es la escritora más emblemática de la imaginación gótica, y sus novelas fueron punto de referencia para los autores que cultivaron el género. Tres obras se alzan en el altar de la literatura gótica: Los misterios de Udolfo de la Radcliffe, El monje de Lewis, y Melmoth el errabundo de Maturin (los tres editados en esta colección).

Los misterios de Udolfo se desarrolla en el siglo XVI, y está ubicada en Francia e Italia. Emily, como todas las heroínas de la Radcliffe, se enfrenta a las adversidades y desastres provocados por Montoni con la fuerza de la racionalidad, después de haber sucumbido momentáneamente a la superstición. La persecución del malvado Montoni tiene lugar en el castillo de Udolfo, donde acontecen múltiples fenómenos sobrenaturales: vagas figuras extrañas, un fantasma en las almenas, sepulcrales voces misteriosas... Los misterios de Udolfo, junto con El Italiano, son las cimas del arte de Ann Radcliffe, y de la novela gótica y romántica.

«A los conocidos atavíos góticos de sus predecesores –señala Lovecraft en su ensayo sobre la literatura de terror–, Mrs. Radcliffe añadió un genuino sentido de lo sobrenatural, tanto en los escenarios como en los incidentes, que raya en la genialidad; cada pormenor de la ambientación y de la intriga contribuye artísticamente a crear la impresión de horror ilimitado que ella quería transmitir».